
El Ollie: Un Clásico Imprescindible
El Ollie es uno de los trucos más icónicos y versátiles del skateboarding. Inventado por Rodney Mullen en los años 80, este truco consiste en hacer saltar la tabla. Dominar el Ollie te dará acceso a una gran variedad de trucos avanzados y combinaciones.
Requisitos Previos: Lo Que Necesitas Saber
Antes de intentar un ollie, debes tener confianza con la tabla. También es recomendable tener un buen nivel de equilibrio y coordinación sobre la tabla para mantener el control durante todo el movimiento. Una vez lo tengas, pasaremos a aprender el kickflip.
Mecánica del Kickflip: Entendiendo el Movimiento
El kickflip combina un ollie con un movimiento diagonal del pie delantero para hacer girar la tabla. La clave está en el tiempo y la dirección en que deslizas tu pie frontal para iniciar la rotación, mientras mantienes el control con el pie trasero para asegurar un buen pop.
Pasos para ejecutar un ollie:
- Posición de los pies: Pie trasero en el tail y pie delantero con los dedos apuntando ligeramente hacia afuera
- El pop: Da un pop fuerte como en un ollie normal
- El flick: Desliza el pie delantero en diagonal hacia el pocket del nose
- Control aéreo: Mantén los hombros alineados para evitar rotaciones no deseadas
- Aterrizaje: Espera a que la tabla complete su rotación y atrápala con ambos pies
Problemas Comunes y Sus Soluciones
Muchos principiantes experimentan dificultades como que la tabla no gira completamente, gira demasiado rápido, o tiende a alejarse durante el truco. Si la tabla no gira lo suficiente, intenta poner más énfasis en el movimiento diagonal del pie delantero. Si sale disparada lejos de ti, trabaja en mantener tu centro de gravedad sobre la tabla durante todo el movimiento.
Otro problema frecuente es aterrizar con solo un pie en la tabla. Esto suele ocurrir porque no estás esperando a que la tabla complete su rotación o porque tus hombros no están alineados correctamente. Concéntrate en mantener los hombros paralelos a la tabla y practica el timing del aterrizaje.
Recuerda que la práctica constante es la clave para dominar cualquier truco de skateboarding. No te desanimes si no consigues el kickflip en tus primeros intentos. La mayoría de los skaters necesitan semanas o meses para conseguir su primer kickflip limpio. Con dedicación y persistencia, eventualmente dominarás este clásico imprescindible que te abrirá las puertas a trucos más avanzados como el varial flip, el heelflip o el 360 flip.